La formación de residentes se debe basar en el marco legal vigente, las últimas evidencias científicas y la perspectiva de derechos humanos

El Ministerio de Salud de la Nación publicó este viernes el temario y la bibliografía para los exámenes de residencia de medicina y enfermería. Diferentes profesionales de la salud hemos detectado que estos contenidos no incluyen temas vinculados a la atención de la salud sexual y (no) reproductiva, específicamente la interrupción del embarazo, cuidados posaborto, anticoncepción, parto respetado, entre otros.
Todo profesional de la salud en proceso de especializarse debe adquirir formación sobre estas prácticas, que forman parte de la atención integral de la salud de las mujeres y otras personas con capacidad de gestar. Los programas de formación para las residencias deben satisfacer esta necesidad conforme la evidencia más actualizada y rigurosa, un enfoque de derechos, el marco legal vigente y las buenas prácticas de enseñanza y aprendizaje.
Desde REDAAS observamos con suma preocupación que la actual gestión de gobierno moldea la agenda de salud y la asignación de recursos invisibilizando los problemas específicos de salud de las mujeres, lo que contribuye a reproducir una situación de desigualdad y violencia que impacta en el ejercicio pleno de sus derechos.
La importancia de formar especialistas con competencias específicas para el cuidado integral de la salud
El aborto es un evento reproductivo que puede ocurrirle a cualquier mujer durante su vida fértil. Puede tratarse de un aborto espontáneo o inducido. A nivel global, se calcula que 1 de cada 5 embarazos termina en un aborto inducido, y el 15% de todos los embarazos detectados se abortan espontáneamente. Esto supone que 1 de cada 10 mujeres ha tenido, al menos, un aborto espontáneo a lo largo de su vida reproductiva.
Hoy, en la Argentina, la interrupción de un embarazo es una opción legal. Todas las personas con capacidad de gestar pueden decidir, hasta las 14 semanas de gestación inclusive si seguir adelante o no con su embarazo (IVE), y también cuando exista un peligro para su vida, su salud, o el embarazo sea resultado de violación (ILE).
La formación en la residencia debe apuntar a un perfil de especialistas que tengan competencias específicas para el cuidado integral de la salud de las mujeres y otras personas con capacidad de gestar, particularmente en sus aspectos sexuales y reproductivos a lo largo de las distintas etapas del ciclo vital. Esto abarca conocimientos, habilidades, destrezas y actitudes específicas para abordar problemas de salud prevalentes y con alta carga de enfermedad que afectan a las mujeres en la Argentina, como el aborto. También, la formación durante la residencia debe incorporar en sus prácticas las obligaciones de respetar, proteger y garantizar el derecho a la autonomía de las personas gestantes, bajo una mirada de género, que incluye el derecho a acceder a una IVE y/o ILE. Por último, también la formación debe promover las responsabilidades profesionales de cumplir con el marco normativo vigente.
Por esto mismo, los conocimientos sobre el aborto son necesarios, como mínimo, para salvar la vida de las mujeres, adolescentes y niñas y, por tanto, imprescindibles en las facultades de medicina y otras ciencias de la salud, así como en las instituciones formadoras de especialistas.